El perro del hortelano, de Lope de Vega

El perro del hortelano es una composición teatral cómica, escrita por Lope de Vega. Es una comedia de tema profano, clasificada en Costumbristas y de capa y espada.

La obra comienza con dos personajes hablando en una terraza: Marcela, la dama de la condesa Diana y Teodoro, su secretario. Tristán, uno de los criados, vigila la puerta por si aparece alguien, cosa que ocurre. Diana surge cuando ellos huyen y sospecha que ha estado algún hombre por ese lugar. Al día siguiente descubre que Marcela está enamorada de Teodoro y viceversa. Ambos quieren casarse y ella acepta casarlos. En ese momento, unos celos se despiertan en su interior como consecuencia de sus sentimientos escondidos hacia Teodoro. Desde ese momento, intenta por diversos modos hacerle ver que ella le ama y le desea, pero para desgracia de Teodoro, cuando este se da cuenta y abandona su amor hacia Marcela para irse con Diana, esta lo trata mal y le rechaza. Finalmente, con ayuda del ingenio que caracteriza a Tristán, Teodoro pasa a tener sangre noble al mentir sobre quién es su padre y poder casarse con la condesa (esta era una de las razones por las que le rechazaba). Diana se entera del plan y lo mantiene en secreto junto con Tristán y Teodoro. En el desenlace Teodoro y Diana, una vez casados, se mudan a España con su padre.

No he leído muchos libros de teatros, pero, al final, todos ellos me han gustado. El perro del hortelano tiene unos aspectos muy típicos; me refiero al triángulo amoroso que se forma entre Marcela, Teodoro y Diana. Me veo obligada a remarcar que me sorprendió la simpleza con la que los tres se enamoran y abandonan dicho amor varias veces, siempre con indiferencia. Es una obra entretenida y ligera a la hora de leer. No me ha resultado fácil llevar a cabo su lectura pues no estaba adaptado. El libro tiene toques de humor con los que divierte a cualquier lector. No puedo aclarar con exactitud qué personaje me ha gustado más y por qué, ya que con el teatro me cuesta profundizar en ellos e identificarme con sus propias personalidades. Quizás me decanto más por Tristán. Considero El perro del hortelano como una obra que todos los apasionados por el teatro deberían leer.